Jun, 2025.- Ser joven es sinónimo de cambio, progreso, a todas luces es enfrentar los desafíos y crear o recrear un espacio para el desarrollo pleno y el futuro, convertir problemas en oportunidades, soluciones, ser el motor impulsor de las sociedades.
En un contexto global marcado por desafíos ambientales, económicos y políticos, las nuevas generaciones en Cuba se han convertido en la fuerza vital para el desarrollo sostenible y la soberanía del país.
Su dedicación hacia estos objetivos es digna de admiración y reconocimiento.
Ellos demuestran un profundo compromiso con la búsqueda de soluciones innovadoras, desde proyectos de reforestación hasta la promoción de energías renovables; lideran iniciativas que preservan los recursos naturales y promueven la resiliencia frente al cambio climático.
Además, los jóvenes son cruciales en la promoción de la soberanía nacional a través de la participación activa en proyectos agrícolas sostenibles y en el impulso de la producción local, al fortalecer la seguridad alimentaria y reducir la dependencia de las bloqueadas importaciones.
La participación de los pinos nuevos en la esfera socio-política también es relevante, con su representación, involucrados en organizaciones no gubernamentales como la Asociación Nacional de Innovadores y Realizadores y la Asociación Hermanos Saiz, y otras donde defienden los derechos humanos, la igualdad y la justicia social.
Sus voces se alzan y escuchan en los debates públicos y en la defensa de los intereses nacionales.
Son ellos quienes demuestran que el desarrollo sostenible y la soberanía no son metas inalcanzables, sino desafíos que se superan con dedicación y compromiso.
La juventud cubana forja un futuro prometedor para Cuba y sienta las bases para una sociedad más equitativa y autónoma.